Durante un operativo de control, efectivos de seguridad detectaron una camioneta que trasladaba productos alimenticios sin cumplir con las normas higiénico-sanitarias correspondientes.
Al inspeccionar el vehículo, los agentes hallaron seis animales caprinos faenados y 79 piezas de queso artesanal, que eran transportados sin refrigeración ni condiciones adecuadas de conservación. Según informaron las autoridades, la mercadería superaba los 100 kilos de carne en total, representando un riesgo para la salud pública debido a la posibilidad de contaminación y transmisión de enfermedades.
El conductor del rodado fue notificado e infraccionado por violación al artículo 206 del Código Penal, que sanciona la propagación de enfermedades peligrosas y contagiosas. Asimismo, toda la carga fue secuestrada y decomisada, quedando a disposición de los organismos sanitarios competentes, quienes procederán a su destrucción para evitar su comercialización ilegal.
Fuentes oficiales remarcaron la importancia de estos controles en rutas y caminos, con el objetivo de proteger a los consumidores y garantizar que los productos de origen animal lleguen al mercado en condiciones seguras.
